LA TRIUNIDAD DE ALÁ (segunda parte)
Hay varios pasajes que dan a entender que de alguna manera ‘Isa Al-Masih es Alá:
- Filipenses 2:5-11 5 Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Isa al-Masih; 6 que existiendo en forma de Alá, no consideró el ser igual a Alá como algo a qué aferrarse; 7 sin embargo, se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; 8 y hallado en la condición como hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. 9 Por lo cual Alá también le ensalzó a lo sumo, y le dio el nombre que es sobre todo nombre; 10 que al Nombre de Yeshúa (Isa) toda rodilla de lo celestial, de lo terrenal, y de lo infernal se doble. 11 Y todo lenguaje confiese que Isa al-Masih es el Señor, para la gloria de Alá, el Padre.
- Inyil de Isa al-Masih narrado por Juan 10:22-39 22 Y se celebraban la fiesta de la dedicación (Hanukkah – Janucá) en Jerusalén; y era invierno; 23 E Isa andaba en el templo por el portal de Suleimán. 24 Y le rodearon los judíos y le dijeron: ¿Hasta cuándo nos dejas en suspenso? Si tú eres al-Masih, dínoslo abiertamente. 25 Les respondió Isa: Os lo he dicho, y no creéis; las obras que yo hago en nombre de mi Padre, éstas dan testimonio de mí; 26 mas vosotros no creéis, porque no sois de mis ovejas, como os he dicho. 27 Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen; 28 y yo les doy vida eterna y no perecerán jamás, y nadie las arrebatará de mi mano. 29 Mi Padre que me las dio, mayor que todos es y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre. 30 Yo y el Padre uno somos. 31 Entonces volvieron a tomar piedras los judíos para apedrearle. 32 Les respondió Isa: Muchas buenas obras os he mostrado de mi Padre, ¿por cuál obra de esas me apedreáis? 33 Le respondieron los judíos, diciendo: Por la buena obra no te apedreamos, sino por la blasfemia; y porque tú, siendo hombre, te haces Dios. 34 Les respondió Isa: ¿No está escrito en vuestra ley: Yo dije, dioses sois? 35 Si dijo, dioses, a aquellos a los cuales fue hecha palabra de Alá (y la Escritura no puede ser quebrantada), 36 ¿a quien el Padre santificó y envió al mundo, vosotros decís: Tú blasfemas, porque dije: Hijo de Alá soy? 37 Si no hago las obras de mi Padre, no me creáis. 38 Mas si las hago, y aunque a mí no me creáis, creed a las obras; para que conozcáis y creáis que el Padre está en mí, y yo en el Padre. 39 Y procuraban otra vez prenderle; mas él se salió de sus manos;
- Inyil de Isa al-Masih narrado por Juan 8:48-59 48 Respondieron entonces los judíos, y le dijeron: ¿No decimos bien nosotros, que tú eres samaritano, y tienes demonio? 49 Respondió Isa: Yo no tengo demonio, antes honro a mi Padre; y vosotros me habéis deshonrado. 50 Y no busco mi gloria; hay Uno que la busca, y juzga. 51 De cierto, de cierto os digo, que el que guardare mi palabra, no verá muerte jamás. 52 Entonces los judíos le dijeron: Ahora conocemos que tienes demonio. Ibrahim murió, y los profetas, ¿y tú dices: El que guardare mi palabra, no gustará muerte jamás? 53 ¿Eres tú mayor que nuestro padre Ibrahim, el cual murió? Y los profetas murieron; ¿quién te haces? 54 Respondió Isa: Si yo me glorifico a mí mismo, mi gloria es nada; mi Padre es el que me glorifica, el que vosotros decís que es vuestro Dios; 55 y no le conocéis: mas yo le conozco; y si dijere que no le conozco, seré como vosotros mentiroso, mas le conozco, y guardo su palabra. 56 Ibrahim vuestro padre se gozó por ver mi día; y lo vio, y se gozó. 57 Le dijeron entonces los judíos: Aún no tienes cincuenta años, ¿y has visto a Ibrahim? 58 Les dijo Isa: De cierto, de cierto os digo: Antes que Ibrahim fuese, YO SOY. 59 Tomaron entonces piedras para tirarle; mas Isa se encubrió, y salió del Templo; y atravesando por en medio de ellos, se fue.
- Inyil de Isa al-Masih narrado por Juan 20:24-31 24 Pero Tomás, uno de los doce, que se dice el Dídimo (el gemelo), no estaba con ellos cuando Isa vino. 25 Le dijeron pues los otros discípulos: Al Señor hemos visto. Y él les dijo: Si no viere en sus manos la señal de los clavos, y metiere mi dedo en el lugar de los clavos, y metiere mi mano en su costado, no creeré. 26 Y ocho días después, estaban otra vez sus discípulos dentro, y con ellos Tomás. Vino Isa, las puertas cerradas, y se puso en medio de ellos, y dijo: Asalamu Aleikum. 27 Luego dice a Tomás: Mete tu dedo aquí, y ve mis manos; y extiende acá tu mano, y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente. 28 Entonces Tomás respondió, y le dijo: ¡Señor mío, y Dios mío! 29 Le dice Isa: Porque me has visto, oh Tomás, creíste: bienaventurados los que no vieron y creyeron. 30 También muchas otras señales, a la verdad, hizo Isa en presencia de sus discípulos, que no están escritas en este libro. 31 Pero éstas son escritas, para que creáis que Isa es al-Masih, Hijo de Alá; y para que creyendo, tengáis vida en su nombre.
- Inyil de Isa al-Masih narrado por Juan 5:5-18 5 Y estaba allí un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo. 6 Cuando Isa vio a éste echado, y entendió que ya llevaba mucho tiempo, le dice: ¿Quieres ser sano? 7 Y el enfermo le respondió: Señor, no tengo hombre que cuando el agua fuere revuelta, me meta en el estanque; porque entre tanto que yo vengo, otro antes de mí ha descendido. 8 Le dice Isa: Levántate, toma tu lecho, y anda. 9 Y luego aquel hombre fue sano, y tomó su lecho, y anduvo. Y era Shabbat aquel día. 10 Entonces los judíos decían a aquel que había sido sanado: Shabbat es; no te es lícito llevar tu lecho. 11 Les respondió: El que me sanó, él mismo me dijo: Toma tu lecho y anda. 12 Y le preguntaron entonces: ¿Quién es el que te dijo: Toma tu lecho y anda? 13 Y el que había sido sanado, no sabía quién fuese; porque Isa se había apartado de la multitud que estaba en aquel lugar. 14 Después le halló Isa en el Templo, y le dijo: He aquí, eres ya sano; no peques más, para que no te venga alguna cosa peor. 15 El se fue, y dio aviso a los judíos, que Isa era el que le había sanado. 16 Y por esta causa los judíos perseguían a Isa, y procuraban matarle, porque hacía estas cosas en Shabbat. 17 E Isa les respondió: Mi Padre hasta ahora obra, y yo obro. 18 Entonces, por tanto, más procuraban los judíos matarle, porque no sólo quebrantaba Shabbat, sino que también llamaba a Alá su propio Padre, haciéndose igual a Alá.
comenta en este foro tu punto de vista